El ministro de Gestión Pública Corach señaló que “difícil suspender las clases”, mientras siguen los partidos. Además, se evitarían las reuniones sociales que generan mayores contagios.
El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Marcos Corach, sostuvo este el miércoles que “el fútbol debería suspenderse”, debido a que no se puede controlar a quienes se reúnen para ver los partidos y porque “el ejemplo no es bueno” por la cantidad de contagios de coronavirus que se registran en los planteles profesionales. El funcionario comparó la situación del deporte con la cuestión educativa y en ese sentido añadió que “es difícil decir: ‘tengo que suspender las clases y el fútbol sigue’“, al referirse a las medidas restrictivas que el Gobierno santafesino anunció a partir de hoy, como consecuencia del crecimiento de contagios y fallecimientos, en el marco de la segunda ola.
Corach explicó que, desde el Gobierno provincial, realizaron “todos los esfuerzos” para lograr que las cadenas televisivas transmitan los partidos de la Liga Profesional de manera liberada, pero no lograron obtener resultados positivos. De todas maneras, reconoció que “echarle la culpa al fútbol” por la situación sanitaria sería buscar “un chivo expiatorio”, pero advirtió que “si se juntan en una casa a ver los partidos, es difícil que alguien pueda controlar a esas personas”.
“Cuando se producen esas aglomeraciones por el fútbol, la verdad es que deberían suspenderlo porque nos genera esta situación, entre otras cosas, en la que nos obliga a tomar medidas muy restrictivas”, agregó. “Además, el ejemplo no es bueno. Uno ve la cantidad de contagiados en los planteles y la verdad es que debería suspenderse“, finalizó Corach.