Aunque arrancaron 0-1 abajo en el marcador, los canallas mantuvieron un juego parejo, con algunos reemplazos en el entretiempo, para dar vuelta el resultado e imponerse con contundencia.
Con goles de Marco Ruben, Nicolás Gamba y Joaquín Laso, Rosario Central dio vuelta una desventaja inicial y le ganó con autoridad a Banfield. Entre los que más celebraron 3 a 1 final está su propio DT, el ‘Kily’ González, que en los días previos habían recibo un ultimátum: si el resultado era derrota, dejaba su puesto.
En el arranque del primer tiempo, cuando Central –con la obligación de ganar– trataba de hacerse dueño del trámite, un error de Rafael Sangiovani en el medio derivó en los pies de Mauricio Cuero y en un tiro libre desde la derecha, que el juvenil Julián Eseiza cabeceó al gol. Apenas corrían 8 minutos en el reloj.
Tras el golpe, los de Arroyito pudieron recuperar la iniciativa y, con más entusiasmo que buen juego, generaron algunas ocasiones de gol, vía Marco Ruben y Nicolás Ferreyra. También Banfield, aprovechando el apuro y cierto desorden defensivo de los locales, tuvo sus oportunidades, pero fue la insistencia de los canallas la que tuvo premio sobre el final de la etapa. Ya en tiempo de descuento, Ferreyra tiró un preciso centro desde la izquierda y Ruben coronó su buen rendimiento hasta ahí con otro cabezazo.
El envión anímico del empate no se aplacó en el entretiempo. Y a diferencia de lo que pasó en la primera etapa, en el complemento, el primer golpe fue auriazul. El eterno goleador canalla peinó una pelota que llegó al área y, después de un rebote, Gamba, que había ingresado por Joan Mazzaco, la empujó al gol.
Más entusiasmado todavía –y redesiñeado para eso en el entretiempo por el ‘Kily’, que también mandó a la cancha a Diego Zabala por un Sangiovani muy errático en la primera etapa–, Central siguió atacando, generó cuatro situaciones claras y a los 25 minutos Laso convirtió al pescar un rebote en el palo, tras un cabezazo de Ferreyra, su cada vez más asentado compañero de zaga.
Con el triunfo, el equipo y su técnico gozarán, en pleno otoño, de un veranito que no asomaba en las últimas semanas. Habrá que ver si en la próxima la levantada se confirma y Central empieza a satisfacer la expectativa de protagonismo con que había arrancado el torneo.